Si conocéis la historia del anime y manga original de Dragon Ball Z, sabréis que la primera gran parada de Goku es enfrentarse a su hermano, Raditz. Para poder recuperar a Son Gohan y proseguir con la trama principal, deberemos derrotarle en combate. No es que sea un adversario que, a la larga, vaya a ser de los más poderosos a los que nos enfrentemos. Pero al hacer acto de presencia en los primeros compases del juego, es posible que nos genere algunos problemas, puesto que todavía nos estamos acostumbrado a los combos y secuencias de ataque y defensa de DBZ: Kakarot.
La lucha contra Raditz
Raditz es un boss de nivel 6 que basa sus mecánicas en dos principales ataques: un golpe brutal que puede quitarnos en buen puñado de vida si no nos protegemos a tiempo, y dos cañonazos que gira en 360 grados. El combate contra Raditz se plantea para que aprendamos a defendernos constantemente y a atacar justo cuando sea preciso.
La principal acción que deberemos hacer es esquivarle con el teletransporte hacia los laterales. Así evitaremos que sus ataques cuerpo a cuerpo puedan golpearnos y las puntuales bolas de energía que lancen queden neutralizadas. Esas bolas de energía parece que no hagan demasiado, pero son lo que nos irá rebajando la salud paulatinamente sin que nos demos cuenta si no les prestamos la suficiente atención y esquivamos justo en el momento preciso.
Una vez superada esa fase, cuando ya le hayamos quitado varias barras de salud, empezará sus ataques en 360 grados. Aquí la clave está, de nuevo, en esquivar los rayos hasta que Raditz se quede exhausto en el centro del mapa. Será entonces cuando deberemos masacrarlo con tantos Kamehameha como podamos. Los láseres los esquivaremos moviéndonos de arriba a abajo, dependiendo de la dirección del ataque.
Seguidamente, Raditz empezará a lanzar patadas cargadas contra nosotros. Son bastante predecibles, no os preocupéis: justo cuando veáis que Raditz empieza a ponerse rojo, solo tendremos que alejarnos lo suficiente de él para esquivar el ataque. Si estamos en mitad de un combo y estamos algo justos de espacio, también podemos bloquearlo, pero lo mejor sería guardar distancias para guardar la máxima salud posible de cara a la recta final.
Esa recta final se iniciará cuando a Raditz le queden solamente tres barras de vida. Será cuando se enfade y sus golpes sean más fuertes, así como sus ataques de ki. En esta fase de enfado, Raditz puede realizar tres patadas cargadas seguidas, y os aseguramos que nos restaría bastante salud si no tomamos precauciones.
Claro que, cuanto más poder aplique Raditz a cada uno de sus golpes, más se cansará una vez los haya realizado. Será ahí cuando no deberemos tener piedad y pegarle con todo lo que tengamos. Si estamos escasos de salud, podemos usar las pociones de Bulma en el inventario.
Premios al completar la misión
Como cualquier buen RPG, Dragon Ball Z: Kakarot tiene un sistema de combate más completo de lo que parece. Para enfrentar a los jefes, deberás de estar preparado.
