El Schalke 04 está en problemas. En tiempos pretéritos el equipo se disputó la conquista de la región minera de la Cuenca de Ruhr con el Borussia Dortmund gracias a jugadores de la talla de Klaas-Jan Huntelar, Jefferson Farfan o Joel Matip. Sin embargo, mucho ha pasado desde que el club levantó su última copa de Alemania en el año 2011 cuando Raúl daba sus últimos coletazos en el fútbol profesional.
Desde entonces ha ido viendo como sus rivales en la máxima categoría del fútbol alemán crecían. El Schalke 04 solo ha sido capaz de clasificarse en una ocasión a Champions League desde la temporada 2013-2014 y, sin los ingresos extra de la competición europea por excelencia, el conjunto comienza a ver complicado hacer frente a la inversión realizada a lo largo de los últimos años. El milagro económico dejó paso a una crisis que se ha dilatado demasiado en el tiempo.
El contexto actual tampoco ayuda. El Veltins-Arena ha dejado de ser un lugar donde congregarse para convertirse en un coloso metálico con 62.271 asientos completamente vacíos. Un paraje desolador cuyo impacto económico en cuanto a ingresos no generados va mucho más allá de las localidades. Se pierde la venta de entradas, la caja de las tiendas oficiales del club y de sus cafeterías. Aunque el fútbol haya evolucionado al modelo televisivo, los ingresos del “matchday” conforman una parte importante de las arcas económicas de los equipos.
La situación pasó de grave a crítica hasta tal punto que desde el área deportiva del club señalaron que era el momento de “dejar de soñar” y “dar un paso atrás para guiar al equipo de manera saludable”.
¿Schalke 04: Adiós a los esports?
Pese a ser un histórico, el Schalke 04 necesita decir adiós a sus grandes estrellas. Sin embargo, ya no cuenta con jugadores tan interesantes como en otros tiempos. A eso hay que sumar dos situaciones negativas: los clubs tienen menos dinero y saben de la necesidad de vender que tiene el Schalke 04. Según Transfermarket, la página web de referencia para conocer el valor de los jugadores en el mercado de traspasos del fútbol mundial, el equipo solo cuenta con 6 activos tasados por encima de los 10 millones de euros.
Aun vendiendo a sus grandes baluartes, no podrá hacer frente a la deuda en el corto plazo. Además, son en su mayoría jugadores jóvenes de los que el club podría esperar un mayor rédito futuro al que quizás tenga que renunciar.
Teniendo en cuenta el valor mínimo y haciendo unas predicciones la mar de pesimistas, una plaza en LEC tendrá un valor de aproximadamente 10 millones de euros. Esta cantidad, además de ser un 5% de la deuda acumulada del equipo, es superior a los ingresos que puede conseguir de su plantilla y acaba con la necesidad de decir adiós a los jugadores antes de tiempo.
La inversión del club en la máxima competición europea de League of Legends parece estar siendo mínima. El equipo no ha probado el sabor de levantar título alguno en torneos regionales y nunca ha sido capaz de clasificarse para los Worlds. Cualquiera que fuera la intención del Schalke 04 cuando entró a los esports no parece haberse cumplido.
El único aspecto que lo redime es su equipo academia. La Prime League puede ser un objetivo estratégico interesante de mantener para el club. Alemania es, de largo, la competición nacional con mejor estructura de ligas. El movimiento a niveles internacionales de un equipo de fútbol no acaba de tener sentido si no es para reforzar una narrativa de gloria y sacrificio en el espíritu local, y no cabe duda de que el paso del Schalke 04 por LEC y LCS no está ayudando en ese aspecto.
Dicen que para valorar si estamos haciendo las cosas bien deberíamos pensar cuantas personas nos echarían de menos si nos vamos ¿Vosotros echaríais de menos al Schalke 04?
Nada es seguro, pero con 200 millones en deudas y un equipo de fútbol con tan malos resultados, parece que la cadena se romperá por el eslabón más débil. Si el Schalke 04 quiere ahorrar dinero, quizás diga adiós al peor equipo de League of Legends de Europa.
