Desde su debut en competiciones internacionales en el año 2016, G2 Esports nunca ha podido superar en primera posición una fase de grupos. Ni en el MSI en el que salen campeones ni en los Worlds en los que son finalistas fueron capaces de lograr una hazaña que debería de ser asequible para un equipo de tal magnitud.
Los aficionados de los samuráis se han acostumbrado a ver partidas algo extrañas durante las primeras fases de la competición. El equipo ha convertido en vicio la costumbre de mostrar actuaciones polarizadas. Lo mismo podemos ver desempeños brillantes que partidos en los que nada parece salir bien.
En su tercera partida de fase de grupos en estos Worlds 2020 ha tocado esta otra cara de la moneda ante Team Liquid. Con una composición algo extraña y un planteamiento difícil de identificar, los muchachos de GrabbZ acabaron hincando la rodilla y cediendo una derrota contundente ante el conjunto norteamericano.
El entrenador señaló en la entrevista pospartido que G2 Esports está teniendo dificultades para adaptarse al metajuego en la jungla. Eso sí, no tanto por el nivel individual de Jankos como por lo difícil que es entonar una buena actuación coral cuando nunca has tratado de desarrollar un estilo de juego en el que el jungla tenga un rol centralizador.
En cualquier caso, esta derrota deja intactas las opciones de los samuráis. Los de Caps siguen dependiendo de sí mismos para avanzar como primeros de grupos y romper con la tradición. Eso sí, también han dado opciones para seguir creyendo al resto de los equipos del grupo y van a tener que completar una segunda semana a la altura si esperan poder estar en la fase de eliminatorias de estos Worlds 2020 de League of Legends.
Yagao, LvMao y compañía han demostrado que son superiores a Rogue incluso en los mejores de uno. Europa tendrá que esperar a la vuelta para cambiar el rumbo del grupo.
