La competición de Counter-Strike: Global Offensive va recuperando la normalidad tras un 2020 sin duelos entre regiones. Los torneos se están preparando, consiguiendo minimizar los riesgos para los jugadores y disputándose todavía en línea, pero batiendo ya en el servidor a equipos de casi todo el mundo. Un esfuerzo que recupera esos duelos trasatlánticos que tanto echábamos de menos a falta de que vuelva la añorada normalidad normal.
Sin embargo, no es momento de lamentarse, si no de seguir disfrutando de la vuelta de los grandes formatos competitivos y los duelos que enfrentan a los conjuntos norteamericanos con los europeos. Hay multitud de competiciones a elegir y, como en los mejores momentos, apenas hay semanas sin grandes torneos de CS:GO que merezca la pena disfrutar.
La IEM Beijing da sus últimos coletazos y las miras ya están puestas en la Dreamhack Masters Winter de 2020. La competición ha conseguido centrar la atención de todos los aficionados al Counter-Strike por un motivo muy sencillo: ha publicado el mejor video de presentación para un evento de Counter-Strike que hemos visto. Teniendo en cuenta, claro, que solo han utilizado metraje del juego y el talento de los editores.
La comunidad de CS:GO se ha enamorado del trabajo realizado por la organizadora de torneos, que tiene acostumbrados a los espectadores a ofrecer tráileres de altísima calidad con cada uno de sus grandes eventos. Los guiños a diferentes momentos icónicos del juego son constantes, homenajeando por ejemplo la jugada conseguida por Jony Boy en el clasificatorio a la próxima BLAST Premier o el mítico "No eres mi amigo, eres mi hermano... amigo" de pashaBiceps.
La Dreamhack Masters Winter de 2020 comenzará el próximo día 30 de noviembre y se prolongará hasta el 6 de diciembre, poco antes de la pausa navideña de las competiciones. Será el preludio al final de un año competitivo para olvidar que, esperemos, dará paso a un 2021 cargadito de deportes electrónicos y Counter-Strike.
El jugador sueco de Fnatic ha enfrentado un proceso judicial por haber evadido impuestos sobre una cantidad que supera los 100.000 dólares, un asunto que la justicia no se tomó a broma. Ahora, Flusha tendrá que pagar de forma retroactiva y prestar servicio comunitario para evitar la cárcel.
