League of Legends es una excepción en el mundo de los videojuegos. Riot Games ha conseguido mantenerse en lo más alto mostrando un crecimiento que casi no se ha detenido en ningún momento de la historia del título de su estreno. Sin embargo, asegurarse un futuro brillante durante más de una década no es una casualidad y por el camino nos encontramos con algunas decisiones que permitieron que la desarrolladora no perdiera tracción.
Sobre los motivos por los que el juego consiguió mantenerse durante tantos años podríamos escribir un libro en el que el primer capítulo hablaría de su visión de negocio basado en un free to play nada abusivo para los jugadores y el segundo el clásico “estar en el lugar y momento oportuno”. Sin embargo, los factores que impulsaron su éxito inicial jamás podrían explicar porqué más de una década inicial seguimos hablando de League of Legends durante varias horas al día.
Eso es exactamente lo que vamos a repasar hoy. Siete decisiones de Riot Games que lo cambiaron todo y que tuvieron lugar tanto en el propio juego como en los despachos. Una sucesión de acontecimientos casi mágica en la que nos saltaremos esas dos primeras variables de sobra conocidas por todos los jugadores. ¿Vamos allá?
El League of Legends paleolítico
Ver cómo se jugaba a League of Legends durante las primeras temporadas puede llegar a resultar molesto para la vista. La interfaz, el mapa y las animaciones cambiaron de forma constante durante las etapas iniciales para conseguir un estilo más estilizado y agradable para los jugadores. De hecho, la información en pantalla podía llegar a ocupar el 30% de la superficie total durante la beta, y recordemos que por entonces se jugaba con monitores de menor tamaño…
Al final, el primer lugar por el que debe entrar un videojuego es por los ojos y, con un estilo u otro, necesita de resultar como mínimo atractivo. Hubo mucho trabajo por parte de Riot Games para modificar todos estos aspectos. Tanto dentro como fuera de la Grieta (retratos de campeones, splash arts…) todos estos apartados fueron sufriendo cambios hasta que la desarrolladora consiguió un resultado apropiado que no supusiese una barrera de entrada adicional.
Hoy en día, incluso sentimos cierta nostalgia por ese apartado gráfico tosco, pero lo cierto es que si hay una cosa a la que no quisiéramos volver jamás de los jamases es a la interfaz gráfica de la beta. Centramos esta evolución, principalmente, en los cambios entre el estreno y el comienzo de la Temporada 3.
Apuesta por los esports
Otro de los elementos clave sin los que no se entiende League of Legends es la competición. Aunque el juego pronto despertó la atención de los jugadores competitivos, no fue hasta el comienzo del año 2013 cuando Riot Games decidió invertir buena parte de sus ingresos en financiar toda una estructura de deportes electrónicos basada en ligas continentales (o regionales en Asia) creando el primer circuito totalmente controlado por una desarrolladora de la historia.
La competición es uno de los pilares fundamentales en los que se basa la fantasía del juego y pone la cima en una pirámide que empieza desde lo más bajo de las colas clasificatorias. Un objetivo último que, aunque casi ningún jugador puede alcanzar, sirvió para generar interés y más temas de conversación sobre un juego que ya se había convertido en un fenómeno de masas y contaba, por entonces, con unos 30 millones de jugadores mensuales.
Las grandes leyendas solo pueden forjarse en lo más alto, y durante años Riot Games puso millones de euros para hacerlo posible en una de las apuestas más arriesgadas y exitosas de la historia de los videojuegos.
La nueva grieta
Aunque ya hemos hablado de interfaz visual y actualizaciones del apartado artístico, la nueva Grieta del Invocador que llegó en la Temporada 5 merecía tener su propio lugar dentro de este recopilatorio. En primer lugar porque sentó las bases de un mapa que apenas ha recibido cambios desde entonces, pero también porque Riot Games tuvo que tomar una decisión muy importante sobre los recursos que pasaría a consumir League of Legends tras recibir la actualización.
Lo cierto es que debe ser una de las pocas veces que, en términos estrictos de programación, apenas hubo problemas. El mapa funcionaba exactamente igual en cuanto a zonas clave para lanzar Destello o ubicaciones de los muros. Todo fueron mejoras y apenas aumentó el consumo de recursos, permitiendo a los jugadores con ordenadores de menor calidad no desengancharse del título por no poder actualizar su hardware.
La Grieta del Invocador es el modo principal de League of Legends. Aunque el Abismo de los Lamentos donde se juega ARAM también tiene su público, sería imposible atender al éxito del juego sin hacer una “paradinha” en esta actualización.
Reworks
El desafío de tener un juego activo durante más de una década que se basa en personajes únicos es que conforme aumenta la tecnología muchos de ellos se quedarán anticuados. Sin embargo, Riot Games siempre ha sabido sobreponerse a este problema de forma moderadamente aceptable cuando se ha tratado de actualizar a los campeones de League of Legends y desde muy pronto comenzaron a llevar a cabo reworks.
La idea surgió durante la beta, cuando muchos personajes tenían combinaciones de habilidades completamente absurdas como el aturdir de Evelynn mientras permanecía invisible. Desde entonces, ha servido para dar segundas oportunidades a personajes y Riot Games se ha especializado en la materia, habiendo logrado que unas cuantas actualizaciones se colaran en competitivo después de llevar años olvidadas en el juego.
En este sentido, la discusión llega sobre cuántos campeones deberían recibir uno de estos al año, pero todos los jugadores están de acuerdo en una cosa: las grandes actualizaciones que combinan apartado visual y jugable suelen ser una maravilla. Al menos, salvo que te gustase jugar Aatrox.
Ajustes de equilibrio y metajuego
Hacemos bien en quejarnos sobre el trabajo de Riot Games llevando a cabo cambios en el metajuego y lo cierto es que hay motivos para criticar. Sin embargo, los jugadores de las primeras temporadas que echen la vista atrás recordarán que la cosa no era mucho mejor por entonces. Algunas habilidades del juego eran completamente absurdas y otorgaban a los jugadores un poder que difícilmente hemos vuelto a ver en el juego.
Para el recuerdo quedan casos como el estreno de Xin Zhao o el stun en área con la carta amarilla de Twisted Fate. Atrocidades desde una perspectiva de ajuste jugable que se han ido moderando con el tiempo. Al menos, en la actualidad la desarrolladora sabe cuales son las líneas que no deben atravesar y cuando pueden arriesgarse más con los cambios. Es cierto que todavía tenemos momentos “200 años de experiencia”, pero son mucho menos habituales.
Además, el metajuego está mucho más abierto. Pese a haberse estancado en los últimos meses, este MSI 2021 ha contado con 81 personajes únicos. El total es superior al de cualquier mundial previo al año 2019.
Nuevos campeones
En League of Legends, jamás existirá tal cosa como un último campeón. Sin embargo, Riot Games ha encontrado un ritmo más que interesante para seguir añadiendo personajes en el juego y hacer que cada uno se sienta único. Hay críticas razonables en las que coincidimos sobre sus diseños y la necesidad de aportar más variedad a ese respecto, pero en cuanto a jugabilidad el salto ha sido espectacular.
La obsesión de Riot Games con las habilidades basadas en tres ataques básicos o la fábrica de pasivas genéricas y poco atractivas se ha sustituido por sistemas completamente nuevos que han encajado en el juego sin demasiados problemas. Las particularidades y la complejidad de algunos movimientos no han hecho que Nasus sea peor campeón por poder resumir su pasiva en media frase, y eso nos parece algo meritorio.
Es evidente que, como todos los puntos en esta lista, hay veces que no se cumple (en fin, Seraphine). Sin embargo, solo sirven para hacer bueno el dicho de “la excepción que confirma la regla”.
La expansión de League of Legends
El universo de Runaterra se expande con nuevos juegos que van desde las alternativas multijugador como el futuro MMO hasta las opciones para disfrutar en solitario de un lore extendido. La futura llegada de Ruined King nos habla de una ambición inusitada y de una diversificación del producto que hará que League of Legends siga vivo incluso en el improbable caso de que los más de cien millones de jugadores mensuales decidiesen abandonarlo.
Riot Games está haciendo valer su experiencia y se ha apropiado del concepto bola de nieve que tanto aplica a las partidas en el juego para hacer que su producto solo se haga más grande con el paso de los años. Estamos ante una cita apasionante con la historia. Cada vez habrá más géneros donde tendremos productos de League of Legends e incluso nos preparamos para un salto a Netflix con Arcane.
Puede que estrictamente este no haya sido un factor decisivo para que él título esté donde está. Sin embargo, es el que consideramos decisivo para una prometedora próxima década.
Imagen: Jason Chan
Incluso los jugadores de League of Legends más veteranos ignoran algunos de los detalles más curiosos sobre el juego. Sin embargo, hoy os contamos siete cosas que quizá no conocías sobre la obra maestra de Riot Games.
